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Numerosos estudios respaldan que la fuerza de agarre puede ser un buen indicador de cómo envejeces. No se trata solo de la fuerza en las manos, es un medidor clave de la salud general y se asocia con la fuerza total del cuerpo. Una buena fuerza de agarre se ha relacionado con un mejor funcionamiento de los brazos, mayor salud ósea y menor riesgo de fracturas, caídas, desnutrición, problemas cognitivos, depresión, trastornos del sueño, diabetes y otras enfermedades crónicas.

Petter Attia, es médico canadiense-estadounidense especializado en longevidad y medicina preventiva. Es conocido también por su pódcast The Peter Attia Drive, donde conversa con expertos sobre temas relacionados con la salud metabólica, la investigación médica y cómo vivir más y mejor. En una de sus últimas apariciones de su pódcast habla de la importancia de la fuerza de agarre.

Según explica Attia en el pódcast, un hombre entre los 40 y 50 años debería ser capaz de mantenerse colgado durante 2 minutos. En el caso de las mujeres, el objetivo sería 90 segundos. “Otro indicador importante en ese rango de edad es la capacidad de cargar la mitad de tu peso corporal en cada mano y caminar durante 1 minuto”, añade. Por ejemplo, si alguien pesa 90 kilos, debería poder llevar 45 kilos en cada mano mientras camina ese minuto. Para las mujeres, la referencia es cargar el 75% de su peso corporal repartido entre ambas manos.

Este tipo de ejercicios no solo miden tu fuerza en la parte superior del cuerpo, sino también coordinación y equilibrio. Además, caminar cargando tanto peso requiere control total del cuerpo. “Cuando la gente entiende lo fuerte que es la relación entre fuerza de agarre y salud, se sorprende. Las personas con la fuerza de agarre más alta tienen hasta un 70% menos de riesgo de desarrollar y morir por demencia, en comparación con quienes tienen una fuerza de agarre más baja”, explica el experto.

Según los estudios

El estudio Handgrip strength and all-cause dementia incidence and mortality, publicado en PubMed y basado en la cohorte prospectiva del UK Biobank, analiza la relación entre la fuerza de agarre y la incidencia y mortalidad por demencia. Además, explora si estas asociaciones varían en función de factores sociodemográficos y de estilo de vida.

El seguimiento de más de 9 años reveló que las personas con la fuerza de agarre más baja tienen un 72% más de riesgo de desarrollar demencia y un 87% más de riesgo de morir por ella, en comparación con quienes tienen mayor fuerza.

https://www.lavanguardia.com/magazine/bienestar/20250423/10608396/peter-attia-experto-longevidad-medico-hombre-40-50-anos-deberia-capaz-llevar-50-peso-corporal-mano-caminar-minuto-gvm.html