La ONG francesa Générations Futures, miembro de Pesticide Action Network Europe y de la organización HEAL, estudió el informe de la EFSA “2016 Informe de la UE sobre residuos de plaguicidas en los alimentos” publicado en Julio de 2018, buscando la participación de pesticidas disruptores endocrinos (DE) en todos los residuos encontrados.
En los programas de seguimiento generales (programa coordinado de la UE y programas nacionales) se testaron 84.657 muestras de alimentos. El 49,3% de estas muestras contenían al menos un residuo de plaguicida cuantificado (o varios). Se excedieron los Límites Máximos Recomendados (LMR) en el 3,8% de las muestras. 109 843 residuos en total fueron cuantificados y relacionados con un total de 41.722 muestras y 350 pesticidas diferentes.
Générations Futures verificó estos 350 pesticidas. 157 de ellos (44,86%) están incluidos en la base de datos Tedx (creada por Theo Colborn y que enumera los productos químicos para los cuales al menos un estudio científico publicado encuentra un efecto DE y por lo tanto sospechosos de ser disruptores endocrinos.
Estos 157 plaguicidas sospechosos de DE representaron 69.433 residuos, lo que equivale a 63,21% del total de 109 843 residuos de plaguicidas hallados por la EFSA.
“Este análisis muestra claramente que los residuos de plaguicidas en los alimentos son una fuente importante de exposición a los EDC ya que se sospecha que casi dos tercios de los residuos de plaguicidas en los alimentos europeos son EDC! », declaró François Veillerette, Director de Générations Futures. «EFSA simplemente no puede seguir afirmando que las cosas están bajo control porque los LMR rara vez se superan. De hecho, los plaguicidas DE pueden actuar a dosis muy bajas por lo que para el riesgo que suponen estos productos químicos DE es más importante el período de exposición que la dosis en sí. Los fetos están, por ejemplo, en alto riesgo con estos pesticidas DE que pueden desencadenar enfermedades más adelante en la vida como el cáncer, la diabetes, la reproducción deficiente y el desarrollo del sistema nervioso. La Comisión debería, por lo tanto, lanzar una política de sustitución sistemática para reemplazar estos pesticidas sospechosos de ser DE”. Añadió.